El otro día iba tan salida que me enrollé con un calvo que tenía una picha de 8 cm. Sí, sí, en serio, 8 cm. ¡Hasta mi sobrino el pequeño la tiene más grande!. Aunque debo reconocer que lo pasé bien, porque yo creo que, aunque suene a tópico, lo importante es saberla manejar, y además no veas como movía la lengua el hijo de puta.